Situado al este de Siberia, en Rusia, se encuentra Oymyakon, considerada la región más fría de la Tierra. En Oymyakon, en los inviernos que duran 9 meses, pueden alcanzarse temperaturas mínimas de -64 ºC en febrero. Pero fue en enero de 1926 cuando se llegó a la cifra récord de -71ºC, convirtiéndose así en la temperatura más baja registrada en una zona habitada, pues la más fría del planeta recogida hasta la fecha fue de -89 ºC, en la Antartida.
Para acceder a un lugar tan remoto, hay que hacerlo a través de la Autopista de Kolyma. Stalin la hizo construir con presos de los campos de concentración. Muchos morían al poco tiempo y se les enterraba debajo de ella. De ahí que la autopista de Kolyma también se le llama «carretera de los huesos«.
En Oymyakon, apenas habitado actualmente por 472 habitantes, cuando el mercurio desciende a -52ºC los colegios cierran. Los marineros después de recoger el pescado, éste se congela en 30 segundos. Si se paran mucho tiempo los motores de los coches, la gasolina se solidifica. Los termómetros que usan los habitantes de este pueblo siberiano, son de alcohol y no de mercurio, ya que a -39ºC se congela el mercurio.