Los teléfonos móviles hacen explotar las gasolineras

Los teléfonos móviles hacen explotar las gasolineras A estas alturas, todo el mundo sabe que para repostar combustible en una gasolinera, hay que tener el motor apagado, la radio apagada, las luces apagadas, y además el teléfono móvil también apagado. Esto está oficialmente estipulado por ley, en el artículo 115 del reglamento general de circulación. Si bien, seguramente hay una buena razón para exigir esto, lo que no va a ocurrir es que produzca una explosión en la gasolinera.

El mito del teléfono móvil en la gasolinera, asegura que si haces o contestas una llamada mientras estás repostando, la radiación electromagnética generada por el teléfono, puede detonar el vapor de gasolina que haya en el ambiente, y convertir toda la gasolinera en un infierno de llamas.

Aunque varios programas de televisión como Cazadores de mitos o Brainiac han intentado hacer explotar vapor de gasolina con un móvil para demostrar o desmentir dicho mito, ninguno lo ha conseguido. La razón es que las emisiones electromagnéticas de un móvil son incapaces de generar la chispa necesaria para prender el gas. Así que los móviles no explotan gasolineras.