La vida al límite de Keith Moon

La vida al límite de Keith MoonSi alguien merece el apodo del Dios de la fiesta este debería ser sin dudar el músico de rock Keith Moon, quien fue batería de The Who.

Su vida transcurrió llena de excesos y excentricidades. Entre sus gestas más recordadas se cuentan la destrucción constante del mobiliario de los hoteles donde se hospedaba, peleas en casa de Steve McQueen donde mordió al perro de este, siendo llamado a comisaria y presentándose disfrazado de nazi, romperle una guitarra de juguete en la cabeza a Eric Clapton, intentar convencer a Los Beatles que lo contrataran como batería porque Ringo Starr «apestaba», poner pólvora en exceso en su batería y hacerla explotar en un show, y por supuesto emborracharse y drogarse hasta morir.

La noche de su muerte, acudió a una fiesta organizada por Paul McCartney, cuando volvió a su domicilio se tomó 32 pastillas de Clometiazol que eran para superar su adicción al alcohol. Su estómago solo pudo digerir 6.

Se habla que el muppet, Animal, está inspirado en Moon, ya que ambos tocaban la batería de manera incontrolada.

Otra curiosidad más de este personaje es que los JJ.OO de Londres, lo quiso resucitar.