¿Quien no ha ido a Escocia preguntándose donde estaba el famoso lago, con el morbo de ver algún tipo de huella dejada por el monstruo? Es posible que incluso haya gente que aún sigan creyendo en su existencia. Pues bien, según algunos científicos es imposible que exista el monstruo del Lago Ness. Y no es una razón ni ecológica no genética, es alimenticia.
La criptozoología estudia la existencia de animales que se presuponen extintos, y según esta ciencia un depredador gigante como debería ser Nessie, necesitaría continuamente alimentarse de animales que el lago no puede ofrecerle. Este mito extendidísimo hace que la región del monstruo escocés más famoso de la historia se nutra de turistas todos los años.